En los estudios de EsRadio Guadalajara, Mónica Gallo, Diego Gismero y un servidor hemos comentado algunos de las películas que se pueden ver en los Multicines Guadalajara.
Eli Roth parece que con esta peli ha dejado atrás su pasado siniestro dedicado al gore.
Aquí nos ofrece cine familiar, con tintes de terror del que no asusta ni a niños de cuatro años.
Uno de los elementos que colabora a convertir esta peli en ñoña y aburrida es el niño Owen Vaccaro, que nos tortura con una interpretación que invita a la somnolencia y, en ocasiones, a la irritación.
Jack Black se ha convertido en un actor con oficio que pone la directa para ofrecernos una interpretación solvente, pero demasiado parecida en todas sus películas.
Cate Blanchett está, como es habitual, estupenda, lo más solvente en esta película de casa encantada y brujería.
Resulta una especie de Harry Potter, pero con estudios en domicilio, sin ir a academias.
Una producción para ir en zapatillas y batita de lana de los Pirineos, de las de ver en casa. Dependiendo del horario hay varias opciones. Por la tarde para dormir la siesta y por la noche para irte temprano a la cama.
La historia de una niña adoptada por la muerte de sus padres, que padece una enfermedad de larga evolución que en los años noventa tenía mal pronóstico.
Resulta difícil hablar mal de una peli con tema trágico, protagonizado por una chiquilla rubita.
Es cómo no tener sentimientos, ni humanidad.
Pero debe quedar claro que me solidarizo absolutamente con los enfermos de esta patología, a los que traté durante más de una década.
Aquí solo hago crítica de la obra cinematográfica.
Estoy seguro que estas aclaraciones eran más que obvias.
Pequeño secreto no llega a ser más que un pobre telefilm, que pretende ser lacrimógeno, utilizando los recursos más manidos del melodrama de peor estopa.
Con una dirección de manual, no aporta nada ni al tema, ni al cine.
Esta producción brasileña ha tardado dos años en llegar a nuestras pantallas y tal vez si no hubiera llegado habría sido un acierto.
A veces, pasa que alguien te habla de una peli y te dan ganas de verla.
Ya sé que le dieron el Oscar a la peli, al director y al montaje y que además obtuvo Globos de Oro, Baftas y mil premios más, pero a mí, cuando la vi, en su estreno no me gustó.
Repasando las críticas, todas son positivas menos la de mi amigo (desde hace poco) Don Carlos Boyero.
La recordaba liosa, reiterativa y aburrida.
Verla doce años después da perspectiva.
Comparada con otras pelis de Scorsese no es la mejor dirigida, posiblemente cualquiera de sus otros filmes tiene una factura más brillante. Porque al director italoamericano hay que reconocerle que sabe mover la cámara y encuadrar los planos como pocos.
Infiltrados tiene una dirección de manual, sin grandes planos secuencia, con un montaje muy técnico, pero sin toque de autor.
Respecto a la trama, en mi opinión es demasiado efectista, sin profundizar demasiado en los personajes. Predomina la acción y la violencia, y es ahí cuando la peli se va arriba, porque los conflictos morales quedan muy en segundo plano.
Jack Nicholson siempre parece que haga una caritatura de su personaje, en esta ocasión me parece un malo más de postureo que de verdad y no me inspira demasiado miedo.
Me divierte ver a Matt Damon de malo, cuando siempre ha hecho el papel de norteamericano bien nutrido lleno de ideales y hamburguesas, no olvidemos que fue el soldado Ryan. Es posiblemente el personaje más malvado, con menos escrúpulos, capaz de traicionar y mentir como nadie.
Leonardo DiCaprio es un actor que ha ido ganando con los años, sus colaboraciones con Scorsese han sido muy fructíferas. Es el personaje con conflicto moral, con una situación muy difícil, que solventa con maestría. Posiblemente me guste más al principio cuando se inicia en el mundo de la delincuencia y parece que le gusta, cuando se vuelve escrupuloso y enamorado me divierte menos, aunque reconozco que su personaje crece en dramatismo.
Vera Farmiga está estupenda, se enamora del que cree el chico malo, pero cuando descubre quien es el malo de verdad lo desprecia, paradojas de la vida. Muy delgadica, pero arrebatadora con sus trajes de chaqueta muy formales, pero debajo se esconde una tigresa.
Mark Wahlberg es mi personaje favorito, deslenguado, pero sincero, sus comentarios fuera de tono son certeros, da comicidad y personalidad a la peli. Es el gran justiciero.
Porque si analizáis su final se hace justicia. El que merece honores los tiene y el que merece la muerte la tiene en la puerta de su casa.