Es muy triste terminar esta temporada como una obligación, más que por diversión.
Tanto Elena como yo hemos notado desde el comienzo del primer episodio que la historia estaba desgastada, que nos enfrentábamos ante un alargamiento inútil y fracasado de una historia que se había retorcido para llenar episodios, y no para entretener al espectador.
Me ha sacado de quicio la falta de puntería. Mil disparos y ningún muerto, por lo menos conocido, solo algún figurante sin frase se veía caer, con la penosa sensación de tomadura de pelo.
Las escenas de batalla, que son abundantes. están rodadas como el culo. Montaje penoso, ausencia de racord.
Insultante que en medio de refriegas, supuestamente a vida o muerte, diera tiempo para consideraciones morales o escenitas de amor.
Lo peor con ventaja es la muerte de Carl. Dura dos episodios (eternos) y el duelo hasta el final de la temporada.
Carl ha sido un coñazo durante toda la serie, un niño torpe que encima deja un legado buenista de conciliación en un mundo donde la primera regla es sobrevivir y no hacer lo correcto.
Cuando un personaje tan penoso como Carl desaparece de una serie podría ser motivo de alegría, pero ocupa tanto espacio que ni siquiera su ausencia nos consuela a los espectadores.
Dejemos a Carl que descanse en paz.
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Estaba claro que Negan era un personaje que había que conservar para próximas temporadas a toda costa. Más de veinte oportunidades de eliminarlo son desperdiciadas de manera increíble. En lugar de matarlo y luego la charla, ésta precede de manera desesperante al acto que no se llega a ejecutar.
No hay drama ni tensión narrativa, hay cabreo puro y duro por unos personajes tan tontos.
Hay giros de guión que son de traca o escenas imposibles como cuando los Salvadores disparan todos a la vez con balas defectuosas fabricadas por un Eugene que nadie comprende porqué cambia de bando.
Aún recuerdo lo bien que lo pasábamos viendo a un grupo de supervivientes recorrer los caminos de la zona Este de los USA, intentando escapar de los zombis.
Ahora los caminantes son solo objetos decorativos que han perdido fuerza, de ser las estrellas han paso a secundarios o incluso figurantes.
De todos los personajes me quedo con dos mujeres de armas tomar, la “Viuda” Maggie que no olvida ni perdona y la competente Rosita que no deja de recordarme a Lara Croft.
Es curioso que las peores fueran las dos primeras.
Carrie intenta llevar una vida normal con su hijita y su trabajo en una ONG.
Pero el destino, y ella que es una busca líos, se lo impiden.
El tema central de esta sesión es el poder de los servicios secretos sobre la política.
Se conjura una compleja trama para desbarajustar las buenas intenciones de la Señora Presidenta Electa de los USA.
Como ya va siendo costumbre Carrie Mathison se enfrenta a problemas personales muy graves y al lío de conspiraciones. Una sufridora.
Su trastorno bipolar tampoco ayuda, aunque estos capítulos tienen un valor secundario.
Se habla del poder real, del uso de las redes sociales para crear estados de opinión, del papel de la prensa tradicional, del uso del terrorismo para restringir las libertades y de la manipulación de la verdad.
Un aspecto positivo de la serie es que deja, hasta cierto punto, cerrada la trama.
Claire Danes está estupenda y sobre ella descansa el mayor peso de la serie.
Cuando terminó la sexta me prometí que no vería más The Walking Dead.
Había sufrido mucho.
Pero cuando se estrenó esta temporada que nos ocupa, todo el mundo hablaba de ese primer episodio.
A Elena y a mí nos gusta ver las series de tirón, al menos la temporada entera.
No pudimos evitar ese primer episodio.
Una noche de dolor, de agonía.
Clamamos venganza.
Odiamos profundamente a Negan y Lucille.
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El deseo de revancha nos ha obligado a ver toda la temporada.
Algún episodio resulta muy aburrido, creo recordar que el cuarto especialmente.
Pero los personajes son ya de la familia y seguramente les vamos a seguir siendo fieles hasta que la serie agonice.
Descubrimos nuevas comunidades y algunos nuevos personajes.
Rick Grimes y familia se afanan en intentar acumular aliados para luchar contra Los salvadores.
Pero, a veces, pecan de pardillos, lo cual me pone de los nervios.
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Negan es un tío de lo peor que utiliza la humillación como arma de destrucción.
Aunque vamos descubriendo que tiene sus valores, un poco delirantes, pero mantiene una cierta coherencia, dentro de lo esperable.
Sorprende, pero agrada, la historia de amor entre Michonne y Rick.
Algún episodio se trasforma en drama romántico gracias a ellos. ¿De lo mejor de la temporada?
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Muy duro ver sufrir tanto a Daryl Dixon, uno de los personajes preferidos del respetable, con toda razón.
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Mis personajes más apreciados son Maggie Greene, una luchadora nata que por ser rural maneja el tractor fenomenal.
Y Rosita Espinosa, dispuesta a todo para conseguir eleminar a Negan, con su look a lo Lara Croft.
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Incumpliendo todos mis buenos propósitos veré la siguiente temporada y las que vengan.
Porque Rick, Daryl, Maggie, Carl (muy torpecico), Michonne, Carol, Shasa, Rosita, Jesús… son mi familia.
Cuando venga el Apocalipsis Zombi deseo encontrarme con ellos.
Aunque estoy seguro que seré de los que perezcan más pronto.
Sería uno de esos personajes de relleno que se cargan en el primer capítulo de la primera temporada.
Es lo que tiene ser gordo y torpe.
¿Pero si ha sobrevivido Eugene Porter, porqué no yo?
Aunque odiaría parecerme a él.
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Elenco
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Personajes principales:
Andrew Lincoln como Rick Grimes: Protagonista principal de la serie y el líder de la nueva creación de la comunidad de Alexandría, que se ve obligado a someterse y adaptarse bajo el gobierno de Negan.
Norman Reedus como Daryl Dixon: Cazador y segundo al mando del grupo, y reclutador de Alexandría.
Steven Yeun como Glenn Rhee: Un ex repartidor de pizzas que le salvó la vida a Rick en el comienzo de la serie, es el esposo de Maggie con la cual ha afrontado muchas pruebas durante el transcurso de la serie.
Lauren Cohan como Maggie Greene: Es la esposa de Glenn de carácter fuerte y actualmente embarazada, quien ha perdido a toda su familia. Ella sirve como un enlace entre Alexandría y la Colonia de Hilltop.
Chandler Riggs como Carl Grimes: El hijo adolescente de Rick, que lucha por mantener su renovada moral y ha logrado residir y adaptarse en la comunidad de Alexandría.
Danai Gurira como Michonne: Una guerrera experta en el uso de la Katana, que ha abierto la vista de su solitaria vida anterior y recientemente ha comenzado una relación amorosa con Rick.
Melissa McBride como Carol Peletier: Una miembro del grupo cuyas tragedias que ha tenido la han obligado a usar métodos despiadados lo cual se siente cuestionada por sus acciones.
Michael Cudlitz como Abraham Ford: Ex sargento militar, ex novio de Rosita y actual novio de Sasha.
Lennie James como Morgan Jones: El primer sobreviviente que Rick conoce, que está cuestionando su filosofía pacifista que había adaptado.
Sonequa Martin-Green como Sasha Williams: Una ex bombero, es la novia actual de Abraham y es guardiana de la torre de Alexandría, que ha superado diversos traumas.
Alanna Masterson como Tara Chambler: Una miembro del grupo, cuida por el bienestar de todos y se encuentra actualmente en una carrera de suministros y sin darse cuenta de las condiciones de sus amigos.
Josh McDermitt como Eugene Porter: Un sobreviviente que lucha para demostrar su fuerza al grupo después de buscar dependencia de ellos sobre el conocimiento de una posible cura para el virus caminante.
Christian Serratos como Rosita Espinosa: Es una miembro del grupo demasiado pragmática y mantiene una relación sexual con Spencer.
Jeffrey Dean Morgan como Negan: El líder manipulador de Los Salvadores, y el antagonista principal de la temporada.
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Co-Protagonistas:
Seth Gilliam como Padre Gabriel Stokes: Un sacerdote que ha logrado ganarse la confianza del grupo después de haberlos traicionado anteriormente.
Ross Marquand como Aaron: Un reclutador de Alexandría que trajo el grupo de Rick a Alexandría.
Austin Nichols como Spencer Monroe: Un guardia de Alexandría y el único miembro sobreviviente de su familia.
Austin Amelio como Dwight: Un miembro de Los Salvadores de carácter reacio con quien forma una fuerte rivalidad con Daryl.
Tom Payne como Paul “Jesús” Rovia: Un explorador de la Colonia Hilltop que se presentó ante el grupo de Rick.
Xander Berkeley como Gregory: El líder arrogante y egoísta de la colonia Hilltop.
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Zona Segura de Alexandria:
Katelyn Nacon como Enid: Una adolescente solitaria que reside en Alexandría, que forma una unión especial con Carl, Glenn y Maggie.
Corey Hawkins como Heath: Un experto explorador y corredor de suministros, y es un amigo intimo de Glenn.
Ann Mahoney como Olivia: Una residente de Alexandria que está a cargo de administrar la comida y las armas de la comunidad.
Jason Douglas como Tobin: Un anterior líder del equipo de construcción de Alexandria, que tuvo una breve relación sentimental con Carol.
Kenric Green como Scott: Un explorador y buscador de suministros de la zona residencial de Alexandria.
Ted Huckabee como Bruce: Un miembro de la tripulación de la construcción.
Dahlia Legault como Francine: Una residente de Alexandria que anteriormente trabajaba para Tobin en los muros de construcción.
Mandi Christine Kerr como Barbara: Una residente de Alexandría.
Vanessa Clock como Anna: Una residente de Alexandría.
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El Santuario:
Christine Evangelista como Sherry: Es la ex esposa de Dwight.
Steven Ogg como Simon: Es la mano derecha de Negan.
Jayson Smith Warner como Gavin: es el líder de un pequeño grupo de Salvadores que extorsiona a la comunidad del Reino.
Joshua Mikel como Jared: es un arrogante miembro de Los Salvadores que trabaja con Gavin.
Tim Parati como Emmett Carson: es el doctor de Los Salvadores.
Elizabeth Ludlow como Arat: es una miembro de Los Salvadores, ayuda a Negan en hurtar los suministros, las armas y los muebles de Alexandria.
Mike Seal como Gary: un miembro de Los Salvadores, que hurta suministros, las armas y los muebles de Alexandria junto con Arat.
Joshua Hoover como Joey: un miembro de Los Salvadores, quien vigila a Daryl quien está cautivo bajo las órdenes de Negan.
Martínez como David: Un Salvador con desviaciones sexuales.
Michael Scialabba como Gordon: un miembro de Los Salvadores y amigo de Dwight.
Lindsley Regiter como Laura: es una miembro de Los Salvadores.
Autumn Dial como Amber: es una joven y también esposa de Negan.
Griffin Freeman como Mark: es un miembro de Los Salvadores y ex novio de Amber.
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El Reino:
Khary Payton como el Rey Ezekiel, el carismático líder del Reino.
Logan Miller como Benjamin, es un miembro del Reino, Morgan le enseña aikido.
Karl Makinen como Richard, es un miembro del Reino.
Cooper Andrews como Jerry, es el mayordomo de Ezekiel.
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Oceanside:
Deborah May como Natania, es la líder de Oceanside.
Sydney Park como Cyndie, un miembro de Oceanside y es la nieta de Natania, quien forma una amistad con Tara.
Mimi Kirkland como Rachel, una miembro de edad infante del Oceanside de carácter agresivo.
Briana Venskus como Beatrice, es una miembro de Oceanside.
Nicole Barré como Kathy, es una miembro de Oceanside.
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Los Carroñeros:
Pollyanna McIntosh como Jadis, es la impasiva líder de Los Carroñeros
Sabrina Gennarino como Tamiel, una miembro de los carroñeros y la mano derecha de Jadis.
Thomas Francis Murphy como Brion, un miembro de rango teniente de los carroñeros.
Anja Akstin como Farron, una miembro de los carroñeros.
Gino Crognale como Winslow, un miembro zombificado de los carroñeros con una armadura blindada con espadas y púas de metal empujadas a través de él, que combate con Rick en el pozo de basura.
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Flashback:
Sarah Wayne Callies como Lori Grimes: La esposa de Rick y madre de Carl y Judith, quien murió en la tercera temporada.
Scott Wilson como Hershel Greene: Fue el padre de Maggie y Beth, granjero y veterinario que murió durante la última batalla contra El Gobernador en la cuarta temporada.
Emily Kinney como Beth Greene: Hija menor de Hershel y hermana de Maggie, que fue secuestrada durante la cuarta temporada y perdió la vida en el Grady Memorial Hospital en la quinta temporada.
Chad L. Coleman como Tyreese Williams: El fallecido hermano de Sasha, que fue mordido por uno de los hermanos zombificados de Noah en la quinta temporada.
Lawrence Gilliard Jr como Bob Stookey: Un ex-médico del ejército y el fallecido novio de Sasha que murió en la quinta temporada.
Tyler James Williams como Noah: Un superviviente que Beth encuentra en el Grady Memorial Hospital, fallecido en la quinta temporada.
He disfrutado y he sufrido mucho en esta sexta temporada.
En la mayoría de los episodios la tensión ha llegado al máximo.
Ya he cogido cariño a la mayoría de los personajes y no quiero que fallezca ninguno.
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Los caminantes me siguen dando un miedo terrible.
Por las noches me veo obligado a levantarme a orinar.
Mi próstata tiene el tamaño de un balón de baloncesto.
No puedo evitar pensar que en los escasos cinco metros que separan mi cama del baño voy a ser atacado por un muerto viviente.
Meto debajo de la cama un bate de béisbol y lo cojo cuando la necesidad miccional me obliga.
Pero en la serie lo que más problemas causa a esta familia de supervivientes, no son los mordedores, son los humanos.
El Apocalipsis Zombi ha hecho de la Tierra un territorio sin orden, sin reglas, donde todo vale para sobrevivir.
Nuestros amigos han aprendido que es mejor matar que morir y ante la duda…
Esto quedaba claro hasta que aparece el reconvertido Morgan Jones, interpretado por Lennie James, siembra en Rick, pero sobre todo, en Carol la semilla de la duda.
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Su tesis es que todos los hombres, por malvados que sean, son recuperables, se pueden redimir.
A Carol en los momentos más difíciles le entran los remordimientos por matar para sobrevivir y eso les hace más débiles.
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Sigo siendo fan absoluto de Daryl y de Glenn. Cuanto he sufrido por ellos dos, sobre todo por el segundo. La serie (no quiero hacer spoilers) nos plantea una cuestión que ha sido muy dura.
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En Alejandría donde disponen de un ambiente más confortable, con ducha, cama, agua caliente, electricidad… surgen amoríos con cierta facilidad.
El muchachote que se lía con Michonne es un hombre con suerte.
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Mi chica favorita es Rosita Espinosa, igualica que Lara Croft (versión videojuego, no Angelina).
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Por último mencionar a la luchadora Maggie Greene que en esta temporada lo pasa especialmente mal.
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A pesar del cariño que tengo a la mayoría de los personajes no creo que vea ninguna temporada más.
Lo he pasado tan mal, especialmente los dos últimos capítulos que no quiero volver a padecer este calvario.
Mi consejo: no veáis los dos últimos episodios. Esperad a la séptima temporada y los veis justo antes.
Carrie Mathison quiere llevar una nueva vida en una Fundación, pero su pasado le persigue.
En esta temporada el escenario fundamental es Berlín.
Además de terroristas, de la CIA y de la inteligencia alemana y rusa, contamos con la intervención de la prensa y de los hakers.
Estos dos elementos son actores fundamentales en el teatro del terrorismo internacional y en su lucha por parte de los estados.
La serie desde la tercera temporada no ha perdido interés.
Se incorporan nuevos personajes como la jefa de la CIA en Alemania (Miranda Otto dando vida a Allison Carr) o los espías rusos y disfrutamos (o padecemos) con los ya conocidos.
Carrie vuelve a utilizar su fase maniaca para intentar comprender la realidad, su patología psiquiátrica sigue muy presente.
Los últimos episodios son escalofriantes, interesantes e insoportablemente realistas.
Los atentados de París y Bruselas están presentes en el visionado de la serie que fue realizada antes que sucedieran.
Como ya es costumbre se nos plantean problemas morales en la guerra contra el terrorismo de un calado trascendente.
Hemos visto las cinco temporadas de tirón.
Ya es hora que Elena y yo cambiemos de registro.
Además no nos queda más remedio porque aún no está completada la sexta temporada.
Nos despedimos de momento de la extraordinaria y maravillosa Claire Danes, el alma de la serie, y del resto de los protagonistas, de alguno definitivamente.
Los que se animen a verla que se salten la segunda temporada, incluso la primera.
Esta quinta es estupenda.
Claramente estamos viviendo una edad dorada de las series.
Las dos primeras temporadas fueron muy regulares, especialmente la segunda. La tercera mucho mejor. Esta cuarta excelente.
Carrie Mathison mete el cuezo hasta la ingle y se carga a todos los invitados a una boda para intentar eliminar a un afamado terrorista.
Consigue que se la nombre Jefa de zona de la C.I.A. en Pakistán…
En esta temporada pasan mil cosas.
Investigaciones de la Agencia con una falta absoluta de escrúpulos y de moralidad para obtener objetivos antiterroristas, sin importar la legalidad y la justicia.
También hay de la vida privada de la protagonista con su niñita a la que deja en segundo plano. La hijita es clavada al padre.
La serie ocasionalmente nos da la visión de los terroristas y no es complaciente con el espionaje norteamericano.
Los desastres se van acumulando y nos hacen vivir estupendos momentos de tensión.
De hecho, Elena y yo nos hemos zampado los doce episodios, de casi una hora, en una semana.
Claire Danes está impresionante, componiendo un personaje con muchas sombras, con el que a veces empatizas y en ocasiones aborreces.
Rupert Friend interpretando al agente de campo Peter Quinn es un elemento muy turbador e interesante, espero verlo en las próximas. Por cierto, mucha tensión sexual no resuelta.
Me alegra mucho que Nicholas Brody haya desaparecido de la trama. ¡Qué gran acierto eliminarlo!
Aunque hecho de menos a su esposa Jessica Brody, interpretada por la magnética Morena Baccarin, ahora de moda por su intervención en Deadpool de Tim Miller.
Después de una segunda temporada muy decepcionante vemos, Elena y yo, esta tercera.
Después del ataque al corazón de la CIA con la que terminaba la anterior temporada (y no quiero hacer demasiados spoilers) se nos presentan las consecuencias en la familia Brody, sobre todo en su hija adolescente Dana (papelón).
Por otro lado padecemos con la estupenda Carrie Mathison metida en un maquiavélico plan del Director Saul Berenson.
Una artimaña retorcida y enrevesada, pero genial que da cuerpo a toda la temporada que cobra brío y enjundia.
Desde el principio de la serie queda claro que no hay buenos ni malos, mejor dicho hay malos y peores.
En esta temporada se toma partido por la CIA que aunque con medios poco ortodoxos y nada legales, parece tener claros sus objetivos.
Hay que aceptar que el fin justifica los medios para no cabrearte continuamente con lo que vamos viendo.
La temporada no solo se desarrolla bien sino que termina mejor, eliminando a uno de los personajes que ya era un lastre para la serie.
Claire Danes demuestra ser una actriz excepcional, dando calidad a su personaje, rellenándolo de miles de matices.
Estupenda Nazanin Boniadi interpretando a la experta en finanzas Fara Sherazi. Un personaje clave, pero que no deja de ser una chica modesta y sencilla con sus escrúpulos morales y éticos.
En la vida real Boniadi es portavoz de Amnistía Internacional EE.UU. (AIUSA), con un enfoque personal en la convicción y el tratamiento de los iraníes jóvenes, las mujeres y los presos de conciencia.
Ella tiene su propia página en el blog oficial de Amnistía Internacional EE.UU. y ha escrito artículos de opinión en medios de comunicación como CNN y The Huffington Post.
Elena está enganchada y yo, lo confieso, también.
Dos cosas he sacado en claro:
Primero: las historias de espías son siempre atractivas.
Segundo: yo no serviría para ese trabajo. Soy demasiado flojo.
La desquiciada Carrie Mathison y el ambiguo Nicholas Brody.
Una pareja destinada a la destrucción.
En general mantiene la tensión que mezcla espionaje, política, terrorismo islámico, patología psiquiátrica, conflictos familiares y crisis adolescentes.
Me horroriza la tensión a la que son sometidos los personajes, sobre todo la familia de este congresista de doble vida.
Me molesta la incoherencia argumental de algunas cuestiones que son increíbles. Si fuera de la CIA me cargaría a los dos protagonistas sin dudarlo. Ya sé que me meto mucho en el papel.
Me asombra la buena química sexual que padecen los dos adversariosbarraamantes fervorosos.
Me gusta que los malos no sean solo los islámicos. Los mandamases amaricanos son también presentados como muy malvados. En realidad, no hay buenos.
El último episodio es sorprendente y bestial.
Seguiremos viéndola, pero a mí me aburre ligeramente. Me parece más de lo mismo.
Hubiera eliminado a los protagonistas y continuado esta serie de espionaje, pero con otros.
Destacar la impresionante interpretación de Claire Danes.
El retrato de una paciente maniacodepresivo (Bipolar) es perfecto. Por una vez la cuestión médica resulta realista.
Pocas películas y series han tenido como tema central las investigaciones de la CIA.
Homeland en su primera temporada tiene dos protagonistas como ejes narrativos.
Por un lado Carrie Mathison interpretada por la estupenda Clare Danes.
Por otro Nicholas Brody, que da vida Damian Lewis.
La primera es una agente de campo de la CIA que ha estado durante años en Oriente Medio, con problemas mentales, que trata de ocultar.
El segundo un marine secuestrado por los terroristas durante ocho años.
La serie se basa sobre las investigaciones, la obsesión, de la agente Mathison, sobre el supuestamente “convertido” Brody.
La virtud de esta primera temporada es descubrirnos el sombrío y oscuro mundo del espionaje, donde la legalidad es asaltada sistemáticamente por la Razón de Estado. Donde el fin justifica los medios.
Los personajes son planteados de forma poliédrica. No son buenos, ni malos.
Llenos de problemas familiares y personales.
Personas en continuo conflicto.
Tal vez hubiera preferido que se me dieran menos datos o de forma menos explícita, lo que hubiera contribuido a hacer algo más enigmática la serie.
Destacar, incluso elevar a los altares, a Clare Danes que compone una protagonista estupenda con una capacidad interpretativa impresionante.
Aunque a mí me ha gustado moderadamente a Elena le ha entusiasmado.
Veremos como avanzan el resto de temporadas que pensamos ver de tirón.
Me olvidaba mencionar a la bella Morena Baccarin que ahora está especialmente de moda por el estreno de Deadpool de Tim Miller.
Tal vez en algún momento pensé que la quinta temporada me podría decepcionar. Ya había visto muchos episodios y había riesgo que me ofrecieran más de lo mismo.
Una valor seguro de la serie eran sus potentes personajes que no me iban a defraudar.
Estos episodios que acabo de terminar de ver me han llenado de emoción, de vísceras, de sangre, de cabezas reventadas y de reflexiones sobre la condición humana.
Voy a esforzarme a tope para no hacer spoilers.
En la temporada 5 pasamos de la desesperación absoluta a una cierta y tímida luz al final del camino que se disipa rápido. En los últimos capítulos una comunidad tan buena que no puede ser real.
Daryl Dixon sigue siendo mi personaje favorito, y supongo que el de muchos seguidores de la saga. Es un marginado que encuentra dentro del caos del apocalipsis zombi una familiar a la que cuidar y querer, que le acepta y le necesita. Posiblemente su vida dentro de la masacre generalizada es mejor que la previa.
Carol Peletier se ha transformado a lo largo de la serie de una mujer sumisa y maltratada a una auténtica heroína, manipuladora y posiblemente el cerebro del grupo.
Rick Grimes es el líder atormentado. Sobre él cae la responsabilidad de guiar a esta “familia” hacia la supervivencia.
Me encanta el look a lo Lara Croft de Rosita, una de las nuevas incorporaciones junto con el fornido Abraham Ford.
Se ha seguido escarbando en el alma humana. Como ya dijo Plauto, “Homo homini lupus” (el hombre es un lobo para el hombre).
Efectivamente el mayor peligro no son los caminantes sino los malvados humanos que se van encontrando.
Este grupo de supervivientes se ha creado un código moral para la supervivencia. En un mundo donde no hay leyes, ni justicia, ni orden hay que sobrevivir como sea, pero todo tiene un límite y la pregunta que se hacen nuestros protagonistas es ¿somos buenas personas?, ¿estamos haciendo lo correcto?, ¿vale todo por seguir existiendo?
Alguno de los personajes ante las desgracias sufridas tiene la tentación de rendirse, pero es necesario para el grupo y eso lo mantiene vivo.
Todos tienen su personalidad, su fuerza narrativa y la serie sigue con paso fuerte.
No puedo evitar soñar con podridos y dormir con un bate debajo de la cama. estoy acumulando víveres para cuando llegue el apocalipsis zombi.
Deseo la sexta temporada. ¡Por favor, que no muera Glenn Rhee!
Me declarado ferviente admirador de esta serie de “caminantes”.
Confieso tener sueños, casi pesadillas, después de algunos episodios.
Como tengo la próstata como una pelota de baloncesto me tengo que levantar todas las noches al servicio. Tengo que mirar detrás de las puertas, no sea que me aparezca un zombi.
He pensado seriamente en preparar un arma blanca contundente debajo de la cama por si soy atacado por los mordedores.
Estos muertos vivientes después de un montón de capítulos me siguen dando miedo. Detrás de ellos hubo personas. Son identificables. Son reales. Todo ello da mucho terror.
Pero no os confundáis The Walking Dead es sobre todo un análisis de la conciencia humana.
La pregunta: ¿cómo actuarías en un mundo en el que solo se puede sobrevivir? Sin leyes, sin normas, sin justicia, sin policía. Solo con tu moral, con tus normas, con tu ética.
¿Valdría todo para seguir viviendo? ¿Tendría sentido seguir adelante?
¿Hasta dónde llegarías para proteger a los tuyos?
Mil preguntas que escarban en la mente humana, en sus principios morales.
The Walking Dead es una obra colosal sobre la ética personal y la subsistencia del ser humano.
Se ha conseguido traspasar la barrera de la diversión para trascender a una esfera intelectual sobre la filosofía de la ética natural del ser humano.